"Antes de recibir mi diagnstico, andaba por la vida sin propsito, sin una razn de ser. Lo que me ha tocado vivir me haca falta, necesitaba vivirlo. Tena que pasar por esas experiencias dolorosas para poder ser la mujer que soy hoy da, una versin mejorada de m misma." Adamari Lpez, la actriz reconocida internacionalmente, lo tena todo --una familia querida, un novio perfecto y un papel protagnico en una telenovela exitosa en Mxico-- cuando dos palabras le alteraron la vida para siempre: tienes cncer. De pronto, en solo unos pocos meses, el mundo tal qual lo conoca se le derrumb y toda su vida dio un vuelco sbito. En Viviendo, la normalmente privada Lpez revela los triunfos y tormentos de su vida, compartiendo ancdotas de su niez y su familia, mientras describe su camino por el cncer de seno; la repentina enfermedad de su madre; su casamiento, uno de los das ms felices de su vida; y luego lo que ella considera ser el golpe ms duro de todos: el final de su matrimonio. Sin embargo, a travs de todo, su fortaleza y su fe no se apagaron, y su espritu amoroso y positivo, junto con su eterna sonrisa, la ayudaron a descubrir un nuevo y gratificante comienzo en el amor y en su vida.
"Antes de recibir mi diagnstico, andaba por la vida sin propsito, sin una razn de ser. Lo que me ha tocado vivir me haca falta, necesitaba vivirlo. Tena que pasar por esas experiencias dolorosas para poder ser la mujer que soy hoy da, una versin mejorada de m misma." Adamari Lpez, la actriz reconocida internacionalmente, lo tena todo --una familia querida, un novio perfecto y un papel protagnico en una telenovela exitosa en Mxico-- cuando dos palabras le alteraron la vida para siempre: tienes cncer. De pronto, en solo unos pocos meses, el mundo tal qual lo conoca se le derrumb y toda su vida dio un vuelco sbito. En Viviendo, la normalmente privada Lpez revela los triunfos y tormentos de su vida, compartiendo ancdotas de su niez y su familia, mientras describe su camino por el cncer de seno; la repentina enfermedad de su madre; su casamiento, uno de los das ms felices de su vida; y luego lo que ella considera ser el golpe ms duro de todos: el final de su matrimonio. Sin embargo, a travs de todo, su fortaleza y su fe no se apagaron, y su espritu amoroso y positivo, junto con su eterna sonrisa, la ayudaron a descubrir un nuevo y gratificante comienzo en el amor y en su vida.