Lo vintage está de moda. No es ninguna novedad, cierto. Sin embargo, es un recurso que la mayoría de marcas tienen perfectamente presente y, año tras año, nos obsequian con alguna exquisitez que bien podrían haber lucido en la muñeca, por estética, nuestros padres. Eso sí, no es menos cierto que, si bien la estética es de años pasados, los movimientos están perfectamente actualizados y en los materiales utilizados en la construcción de las cajas podemos encontrar sensibilidades totalmente contemporáneas.
Hay un detalle, aunque no es el único, que caracteriza los nuevos modelos vintage de las marcas contemporáneas: recurren a una configuración con pequeño segundero. Se trata de una disposición heredada de los relojes de bolsillo por los primeros relojes de pulsera, que eran de carga manual. La aguja de…
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MDT (Digital) - 1 Issue, no. 107