Como el WLTP es más largo y, sobre todo, incluye cuatro perfiles de conducción en lugar de dos, hay muchas diferencias entre los resultados de uno y otro que todavía están por ver. Además, ya hay quien apunta a posibles problemas, como la dificultad de calcular y ponderar los puntos de cambio de marcha para cada vehículo probado, que requiere la valoración de un gran volumen de información técnica. También, algunos señalan que las cuatro fases de la nueva prueba son tan distintas que algún fabricante puede tener la tentación de resaltar los datos obtenidos en la que le resulte más propicia. El beneficio está más claro, porque el valor oficial de consumo de gasolina o diésel será mucho más cercano al real y la autonomía homologada para los coches…
You're reading a preview of
Auto Bild Es (Digital) - 1 Issue, 540